Los wearables, también conocidos como dispositivos inteligentes, están cada vez más presentes en el ámbito sanitario, ya que, la preocupación ciudadana por el bienestar y la salud y los avances tecnológicos en el sector han supuesto el marco perfecto para el desarrollo de los mismos. Prueba de ello es que, según un estudio realizado por ABI Research, el 60% de los dispositivos ponibles que se vendieron durante el año 2016 guardaban relación con la categoría salud y fitness.
Si hace unas semanas hablábamos de impresoras 3D que permitían reproducir un corazón con cardiopatías congénitas graves con el fin de preparar a los cirujanos antes de la intervención, hoy mostramos otros wearables sanitarios que nos permitirán diagnosticar y tratar enfermedades.
Un gadget para detectar la sudoración:
Enfermedades como la fibrosis quística puede detectarse con una simple prueba de sudor (además de otras pruebas diagnósticas), por ello, investigadores norteamericanos han creado un gadget basado en un sensor que detecta el sudor y el motivo de la transpiración y mide su composición molecular enviando los resultados para un posterior análisis y diagnóstico del paciente.
Píldora inteligente para enfermos del corazón y diabetes:
Esta píldora inteligente lleva incorporado un microchip comestible que indica tanto al paciente como al médico cuando debe tomarse la próxima medicación. Es sistema consta de un parche que se adhiere a la piel, el cual capta una señal cuando el paciente ingiere el medicamento retransmitiendo dicha acción a un dispositivo móvil inteligente.
Cámara en miniatura ingestable:
Un poco relacionado con lo anterior encontramos mini cámaras ingestables que permiten reemplazar pruebas como colonoscopias o endoscopias, solo sería necesario ingerir la cámara en miniatura y a partir de ese momento se podrían ver imágenes a medida que la cámara avanza por el aparato digestiva. El dispositivo se eliminará de forma natural 24 horas más tarde de la realización de la prueba.
Vendas “mágicas”:
Por último, otro producto innovador son las vendas creadas por una universidad de Gales, las cuales utilizan la nanotecnología y la tecnología 5G para monitorizar la curación en tiempo real, realizando un minucioso seguimiento del avance de las heridas y enviando dichos datos tanto a médicos como enfermeros para una correcta asignación de un tratamiento efectivo.
Como podemos ver con todos estos ejemplos, la tecnología no está solo al servicio del ocio y la diversión, sino que sus avances pueden ayudarnos a vivir mejor y a cuidar nuestra salud y bienestar.